Las mudanzas pueden tener muchos significados: cambio de etapa, necesidad de un espacio más grande o incluso la oportunidad de tener un lugar propio. Pero sea por alquiler o compra, si te vas a mudar, lo primero que debes hacer es pensar y organizar. Confía en tu capacidad organizadora y creas un plan ajustado a tus necesidades.
Para esto, hemos preparado algunos consejos. Síguelos y logra una mudanza sin contratiempos.
Paso 1: mentalízate.
Sabemos que no es lo mismo pensar en la mudanza a largo plazo, que llegar al momento de tener que hacerla. Por eso, lo primero que debes hacer una vez que llegue el día es mentalizarte en el proceso y objetivo que tienes: empaqueta solo aquello que te llevarás al nuevo espacio. Para esto, necesitas prever algunos días antes de la mudanza, hacer una limpieza general de objetos y ropa que no uses y quieras donar o regalar. Así será más fácil saber qué llevarás y qué no.
Paso 2: organiza tu bolso.
Guarda todo y con esto nos referimos a que no dejes nada (o casi nada): deja a la mano un par de prendas de ropa y zapatos, más tus utensilios de aseo personal para armar un bolso con elementos básicos que te permitan moverte en caso de que haya contratiempos con el transporte o incluso los primeros días antes de desempaquetar tus pertenencias.
Paso 3: haz las cajas.
Sí, comenzar a empaquetar puede ser tedioso, pero a la vez emocionante. Recordar momentos con cada objeto que guardas y decidir qué llevarte y qué no, es un momento incomparable y lleva tiempo. Comienza a hacer las cajas al menos tres semanas antes, de manera que puedas disfrutar el proceso sin apuros. Eso sí, aunque las cajas sean grandes, no las llenes hasta el tope porque después será difícil moverlas. Mide el peso y asegúrate de que no se vayan a romper.
Paso 4: haz un inventario.
Lleva una lista de cuántas cajas tienes, cuántos objetos sueltos llevas y qué electrodomésticos entran en el transporte que escojiste para la mudanza. Así será más sencillo determinar que todo haya llegado con éxito al lugar de destino o incluso será más sencillo hacer un reclamo en caso de extravío. Por más memoria de elefante que tengas, deja todo por escrito. La mudanza es un proceso tan complejo que hasta la mente más brillante puede olvidar algún detalle.
Paso 5: contrata una furgoneta para la mudanza.
Si tienes coche propio o tienes familiares o amigos con coche o furgoneta, hacer la mudanza por tu cuenta puede ser una opción. Sin embargo, puede generar mayor estrés al tener que organizar los viajes, las idas y vueltas de una casa a otra para verificar que no se quede nada y que todo llegue a su destino. Mientras que al contratar una furgoneta, solo haces un viaje y descansas. ¡Tómalo como una inversión! Suficiente estrés con la cantidad de cajas como para también estar pendiente de que todas lleguen en diferentes viajes.
Por más angustiante que sea, intenta disfrutar el proceso. Siente la emoción de cambiar de espacio y comenzar una nueva vida en un lugar totalmente diferente.
