La adquisición de una vivienda es un evento que significa mucho en la vida de cualquier persona. Posiblemente para lograr esto hayas tenido que hacer algunos sacrificios, por eso hay que ser precavidos para tomar la decisión correcta.
Plantéate tus necesidades
Tal vez necesitas tranquilidad, comodidad o un espacio para ejercitarte. Realiza una lista con tus necesidades y las de tu familia, trata de ordenarla de acuerdo a las prioridades de cada uno. Procura ser muy específico con este ejercicio para que puedas tener mayor claridad de lo que necesitas.
Una vez que sepas qué es lo que más le conviene a todos, entonces comienza la difícil tarea de encontrar la ubicación ideal para tu nueva casa.
Busca la asesoría de una inmobiliaria
Para la compra de una casa es recomendable contactar a una agencia inmobiliaria que pueda ayudarte con la búsqueda de la propiedad. Además de conseguir la casa de tus sueños, estas agencias también se encargan de asesorarte en los trámites que debes realizar, así que no dudes en buscar la mejor agencia, recuerda que son los especialistas en este tema.
¡Alerta con el contrato!
La inscripción de este documento en el registro no es obligatoria, sin embargo, esto no hace que el documento pierde alguna validez. Por el contrario, todo lo que aquí se estipule la ley lo valida y por lo tanto es necesario su cumplimiento.
Una vez redactado este documento léelo muy bien antes de firmarlo, recuerda que aquí están todas las pautas que debes cumplir.
Conoce las condiciones de la vivienda
Otro aspecto a tomar en cuenta, es conocer el estado de cargas de la casa que quieres comprar, si la propiedad se encuentra libre de cargas económicas o si el actual dueño tiene una deuda hipotecaria. Para conocer esta información es recomendable que solicites en el Registro de la Propiedad “una nota simple informativa”. Si no has pedido este documento aún, lo mejor es que lo hagas antes de dar el último paso.
